Conservación del sapo balear

El sapo balear (Bufotes balearicus) es una especie de anfibio protegida y endémica del Mediterráneo occidental. La población balear supone el límite occidental de su distribución y, actualmente, se encuentra en regresión, especialmente en Ibiza, donde ha sido catalogada “en peligro de extinción”. En Mallorca está catalogada como “vulnerable”.

Es una especie de hábitos nocturnos y insectívora, que requiere de hábitats acuáticos para reproducirse. Las balsas temporales son sus ambientes preferentes para el emparejamiento y puesta de huevos, ya que limitan la presencia de competidores acuáticos, como la rana (Pelophylax perezi), que vive en aguas permanentes.

En Mallorca, la distribución altitudinal de la especie va desde el nivel del mar hasta los 1000 m en la Sierra de Tramuntana. La principal amenaza para la especie es la destrucción, alteración y contaminación de los ambientes acuáticos donde cría, así como la fragmentación del hábitat a causa de la construcción de carreteras que además ocasiona la muerte accidental de individuos en fase adulta.

La  Fundación Vida Silvestre Mediterránea (FVSM) ha creado una balsa temporal en su sede cerca de Campanet, con el fin de aportar al medio hábitat óptimo para su reproducción. Además, se persigue darle a la balsa un uso educativo para sensibilizar a la población en general sobre la especie, así como sus amenazas y posibles medidas de conservación.

Desde 2020, en colaboración con la Conselleria de Medioambiente, la fundación realiza rescates de renacuajos en peligro por secarse su charca. Los renacuajos terminan su desarrollo y metamorfosis y los pequeños sapos se dispersan por los jardines y bosques de los alrededores.